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ÁFRICA
2014, Definir la falta de respeto y el maltrato a las mujeres durante el parto: una agenda de investigación, política y derechos.
Lynn P Freedman, Kate Ramsey, Timothy Abuya, Ben Bellows, Charity Ndwiga, Charlotte E Warren, Stephanie Kujawski, Wema Moyo, Margaret E Kruka & Godfrey Mbarukuc
El movimiento mundial para promover una atención materna respetuosa está aprovechando los estándares normativos en la legislación y la política. Sin embargo, limitarse a defender normas abstractas es insuficiente para abordar la falta de respeto y los malos tratos. Estas normas deben basarse en las experiencias vividas por las mujeres y en la dinámica de poder subyacente. La falta de respeto y los malos tratos en el parto se definen como interacciones o condiciones consideradas humillantes o indignas por consenso local. Esta definición pretende alinearse con las normas nacionales y de derechos humanos a lo largo del tiempo, proporcionando una base para cuestionar las malas prácticas del sistema sanitario. Las investigaciones en curso tratan de medir la prevalencia y probar las intervenciones, pero es necesario comprender mejor los factores que las impulsan y sus consecuencias. Las intervenciones eficaces requieren teorías claras del cambio y estrategias de evaluación de la aplicación para apoyar el movimiento mundial a favor de una atención materna respetuosa.
Marge A Koblinsky; Cheryl A Moyer, doctora; Clara Calvert, doctora; James Campbell , MPH; Oona M Campbell, doctora; Andrea B Feigl, doctora; Wendy J Graham, doctora; Laurel Hatt, doctora; Steve Hodgins, MD/DrPH; Zoe Matthews, doctora; Lori McDougall , MSc; Allisyn C Moran, doctora; Allyala K Nandakumar, doctora; Ana Langer, doctora.
El Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) 5, con su meta de reducir la mortalidad materna en un 75%, no se ha alcanzado. El elevado número de muertes y morbilidades maternas persiste a pesar de los considerables avances en la cobertura de los servicios de maternidad. Esta discrepancia entre la carga y la cobertura pone de manifiesto una brecha crucial en la calidad de la atención. Además, millones de mujeres embarazadas y niñas adolescentes permanecen fuera del sistema sanitario, rezagadas de los avances en la cobertura. Esta población vulnerable se enfrenta a múltiples retos derivados de sus circunstancias de pobreza, analfabetismo, etnia, exclusión social y/o física y desarraigo, incluso en entornos frágiles y remotos o en zonas de conflicto. La mala calidad y la inaccesibilidad de la asistencia existen en todas partes y afectan a la población de todos los países, ya sean de renta baja, media o alta.

ETIOPÍA
Wondwosen Molla , Aregahegn Wudneh y Ruth Tilahun
La violencia obstétrica es una forma específica de violencia contra las mujeres que viola sus derechos humanos. Es perpetrada por los proveedores de atención obstétrica e implica una asistencia deshumanizada, intervenciones abusivas, una medicalización excesiva y la patologización de los procesos reproductivos naturales. Objetivo: Evaluar la magnitud de la violencia obstétrica y los factores asociados entre las mujeres durante el parto en la zona de Gedeo, al sur de Etiopía.
Muhabaw Shumye Mihret
La violencia obstétrica es un obstáculo que a menudo se pasa por alto para la utilización de servicios de atención sanitaria materna de calidad. En el ámbito del estudio, había pocos datos sobre la violencia obstétrica. Por lo tanto, este estudio pretendía evaluar la prevalencia y los factores asociados de la violencia obstétrica entre las mujeres que dieron a luz en el Hospital Integral Especializado de la Universidad de Gondar, en el noroeste de Etiopía.
Dagmawit Shemelis, Abebaw Addis Gelagay, Moges Muluneh Boke
Los resultados de este estudio revelaron que tres de cada cuatro madres fueron objeto de malos tratos durante la atención al parto en los centros sanitarios. La atención no consentida y la atención no confidencial fueron las formas más prevalentes de maltrato. Entre los factores asociados de forma significativa con el maltrato se encontraban el número de visitas al centro de atención prenatal, el tipo de centro sanitario visitado para la atención del parto y las complicaciones sufridas durante el parto. Por lo tanto, es esencial reforzar acciones como proporcionar educación sobre maternidad durante la atención prenatal y gestionar adecuadamente las complicaciones para mejorar la calidad de la atención a la maternidad en los centros sanitarios. Además, los profesionales sanitarios que trabajan en la atención al parto necesitan formación sobre la importancia del consentimiento informado y la prestación de una atención compasiva y respetuosa. Los centros sanitarios también deberían promover experiencias positivas en el parto garantizando una atención respetuosa, digna, solidaria y consentida.

GHANA
Sarah D Rominski, Jody Lori, Emmanuel Nakua, Veronica Dzomeku y Cheryl A Moyer
Aunque las estudiantes de partería de las escuelas públicas de partería de Ghana hacen hincapié en la importancia de proporcionar una atención respetuosa, de alta calidad y centrada en el paciente, también afirman haber experimentado y participado en diversas formas de falta de respeto y abuso durante el parto. Aunque comprenden la necesidad de una atención respetuosa, también pueden justificar y explicar las razones que subyacen a las prácticas irrespetuosas y abusivas. Esta aparente contradicción subraya la complejidad de debatir y abordar estas cuestiones. Estas jóvenes están comprometidas a garantizar una experiencia de parto segura para sus pacientes y creen que gritar, vociferar e incluso golpear a las mujeres para asegurar un resultado positivo está justificado, es comprendido y posiblemente apreciado por las propias mujeres. Los contextos sanitarios y sociales en los que estas matronas ejercen y viven son polifacéticos, al igual que las cuestiones que rodean a la atención irrespetuosa y abusiva durante el parto (Warren et al., 2015). Este estudio proporciona un punto de partida crucial para que educadores, investigadores y responsables políticos reconsideren cómo debe prepararse a los futuros profesionales sanitarios para ofrecer una atención respetuosa y de alta calidad a las mujeres durante el parto en entornos de bajos recursos.
Meghan A. Bohre, Joshua P. Vogel, Bukola Fawole, Ernest T. Maya, Thae Maung Maung, Mamadou Diouldé Baldé, Agnes A. Oyeniran, Modupe Ogunlade, Kwame Adu-Bonsaffoh, Nwe Oo Mon, Boubacar Alpha Diallo, Abou Bangoura, Richard Adanu, Sihem Landoulsi , A. Metin Gülmezoglu1 y Özge Tunçalp
La agenda transformadora de los ODS proporciona un marco global para abordar las desigualdades sanitarias y de género y mejorar las experiencias sanitarias. Eliminar todas las formas de maltrato a las mujeres durante el parto en los centros sanitarios es un componente crucial de los esfuerzos por transformar los servicios de maternidad a nivel mundial para que se centren en las necesidades de las mujeres y sus familias. Para lograrlo, se necesitan herramientas de medición fiables que permitan comprender el alcance y la carga del maltrato en diversos contextos, medir los progresos e identificar las áreas en las que se necesitan intervenciones y políticas. Empleamos un enfoque sistemático de métodos mixtos para desarrollar dos herramientas -una observación del parto y una encuesta comunitaria- para medir el maltrato de las mujeres durante el parto en cuatro países. Estas herramientas son ahora de dominio público. Animamos a otros investigadores y ejecutores de programas a que utilicen estas herramientas en sus contextos para medir el alcance del maltrato durante el parto. Prevemos que estas herramientas seguirán evolucionando a medida que se realicen nuevos estudios. Midiendo el maltrato a las mujeres durante el parto, podremos diseñar y aplicar programas y políticas para transformar los servicios de maternidad a escala mundial.
Patience A Afulani, Beth Phillips, Raymond A Aborigo, Cheryl A Moyer
Este artículo demuestra que, en cuatro entornos de estudio diferentes de tres países del África subsahariana y el sur de Asia, las mujeres no reciben una atención centrada en la persona durante el parto en un centro sanitario. Aunque las faltas de respeto y los malos tratos manifiestos son infrecuentes, faltan aspectos fundamentales de la interacción entre paciente y proveedor, en particular la comunicación y el respeto por la autonomía de la mujer. Por lo tanto, es necesario redoblar los esfuerzos en los países de ingresos bajos y medios (PIBM) para mejorar la atención a la maternidad centrada en la persona (CMCP). Estos esfuerzos deben incluir la formación de los proveedores sobre la importancia del PCMC, los derechos de pacientes y proveedores y las estrategias para mejorar las interacciones con las pacientes y sus familias. Los proveedores también deberían recibir formación sobre el manejo adecuado de las condiciones que a menudo conducen a interacciones deficientes con las mujeres; por ejemplo, deberían aprender mecanismos de afrontamiento del estrés y recibir instrucción sobre cómo abordar los prejuicios que podrían afectar a su atención a determinados grupos. Además, deberían aplicarse mecanismos de medición y rendición de cuentas para reforzar los esfuerzos por mejorar el PCMC, todo ello en el contexto de un fortalecimiento más amplio de los sistemas sanitarios.
Meghan A Bohren, Hedieh Mehrtash, Bukola Fawole, Thae Maung Maung, Mamadou Dioulde Balde, Ernest Maya, Soe Soe Thwin, Adeniyi K Aderoba, Joshua P Vogel, Theresa Azonima Irinyenikan, A Olusoji Adeyanju, Nwe Oo Mon, Kwame Adu-Bonsaffoh, Sihem Landoulsi, Chris Guure, Richard Adanu, Boubacar Alpha Diallo, A Metin Gülmezoglu, Anne-Marie Soumah, Alpha Oumar Sall, Özge Tunçalp
Más del 40% de las mujeres observadas y el 35% de las encuestadas sufrieron malos tratos durante el parto. Las mujeres más jóvenes y con menor nivel educativo eran las que corrían mayor riesgo, lo que pone de relieve la necesidad de intervenciones a varios niveles. Abordar estas desigualdades y promover una atención a la maternidad respetuosa para todos es esencial para mejorar la equidad y la calidad sanitarias. Nuestros hallazgos pueden servir de base a políticas y programas para garantizar que todas las mujeres tengan experiencias positivas durante el embarazo y el parto y cuenten con el apoyo de profesionales sanitarios capacitados dentro de sistemas sanitarios que funcionen correctamente. Es necesario tomar medidas urgentes para mejorar la prestación de una atención respetuosa a la maternidad en todo el mundo.
Mamadou Dioulde Balde, Khalidha Nasiri, Hedieh Mehrtash, Anne-Marie Soumah, Meghan A Bohren, Boubacar Alpha Diallo, Theresa Azonima Irinyenikan, Thae Maung Maung, Soe Soe Thwin, Adeniyi K Aderoba, Joshua P Vogel , Nwe Oo Mon, Kwame Adu-Bonsaffoh, Özge Tunçalp
Más de la mitad de las puérperas encuestadas en Nigeria, Ghana, Guinea y Myanmar declararon tener un acompañante durante el parto. Según el país, la presencia de un acompañante en el parto se asoció a un menor riesgo de maltrato físico, exámenes vaginales no consentidos y mala comunicación con el personal sanitario. Permitir que las mujeres tengan un acompañante de su elección puede ser una intervención eficaz y de bajo coste para reducir el maltrato durante el parto y el alumbramiento en entornos de bajos recursos. Se necesita más investigación para explorar las mejores formas de implantar el acompañamiento durante el parto en distintos entornos y garantizar que se respeten las elecciones y la autonomía de las mujeres.
Theresa Azonima Irinyenikan, Adeniyi Kolade Aderoba, Olufunmilayo Fawole, Olusoji Adeyanju, Hedieh Mehrtash, Kwame Adu-Bonsaffoh, Thae Maung Maung ,10 Mamadou Dioulde Balde, Joshua P Vogel, Marina Plesons, Venkatraman Chandra-Mouli, Özge Tunçalp , Meghan A Bohren
La morbilidad y la mortalidad de las adolescentes por complicaciones del embarazo y el parto siguen siendo importantes problemas de salud a nivel mundial. Este estudio muestra que las adolescentes y las mujeres jóvenes se enfrentan a altos niveles de maltrato y baja satisfacción con la atención al parto en los centros sanitarios en comparación con las mujeres mayores. Entre los malos tratos más comunes se incluyen el abuso verbal, la mala comunicación, la falta de cuidados de apoyo y la falta de intimidad. Se necesitan acciones críticas para que los servicios sanitarios de maternidad sean más receptivos, respetuosos con las adolescentes y sin prejuicios. Intervenciones como el acompañamiento en el parto pueden mejorar el apoyo social y emocional durante el parto. Los esfuerzos deben centrarse en abordar estas necesidades únicas y reducir el estigma social para garantizar una atención equitativa y no discriminatoria para las adolescentes y las mujeres jóvenes en todo el mundo.

Meghan A. Bohren, Joshua P. Vogel, Bukola Fawole, Ernest T. Maya, Thae Maung Maung, Mamadou Diouldé Baldé, Agnes A. Oyeniran, Modupe Ogunlade, Kwame Adu-Bonsaffoh, Nwe Oo Mon, Boubacar Alpha Diallo, Abou Bangoura, Richard Adanu, Sihem Landoulsi, A. Metin Gülmezoglu1 y Özge Tunçalp.
La agenda transformadora de los ODS proporciona un marco global para abordar las desigualdades sanitarias y de género y mejorar las experiencias sanitarias. Eliminar el maltrato a las mujeres durante el parto en los centros es crucial para transformar los servicios de maternidad y centrarlos en las necesidades de las mujeres y sus familias. Para lograrlo, se necesitan herramientas de medición que permitan comprender el alcance y la carga de los malos tratos en diferentes contextos, medir de forma fiable los progresos e identificar las áreas de intervención y las políticas. Desarrollamos dos herramientas -una observación del parto y una encuesta comunitaria- utilizando un enfoque sistemático de métodos mixtos para medir el maltrato durante el parto en cuatro países. Estas herramientas son ahora de dominio público y animamos a otros investigadores y ejecutores de programas a que las utilicen en sus contextos. Esperamos que estas herramientas evolucionen con nuevos estudios. Al medir el maltrato durante el parto, podemos diseñar y aplicar programas y políticas para transformar globalmente los servicios de maternidad.
Meghan A Bohren, Hedieh Mehrtash, Bukola Fawole*, Thae Maung Maung, Mamadou Dioulde Balde, Ernest Maya, Soe Soe Thwin, Adeniyi K Aderoba, Joshua P Vogel, Theresa Azonima Irinyenikan, A Olusoji Adeyanju, Nwe Oo Mon, Kwame Adu-Bonsaffoh, Sihem Landoulsi, Chris Guure, Richard Adanu, Boubacar Alpha Diallo, A Metin Gülmezoglu, Anne-Marie Soumah, Alpha Oumar Sall, Özge Tunçalp
Más del 40% de las mujeres observadas y el 35% de las encuestadas experimentaron malos tratos durante el parto, siendo las mujeres más jóvenes y con menor nivel educativo las que corrían un mayor riesgo. Esto subraya la necesidad de intervenciones a varios niveles para abordar estas desigualdades y promover una atención a la maternidad respetuosa para todas, lo que es esencial para mejorar la equidad y la calidad de la salud. Nuestros hallazgos pueden servir de base a políticas y programas para garantizar que todas las mujeres tengan experiencias positivas durante el embarazo y el parto y cuenten con el apoyo de profesionales sanitarios capacitados dentro de sistemas sanitarios que funcionen correctamente. Es necesario tomar medidas urgentes para mejorar la prestación de una atención a la maternidad respetuosa en todo el mundo.
Mamadou Dioulde Balde, Khalidha Nasiri, Hedieh Mehrtash, Anne-Marie Soumah, Meghan A Bohren, Boubacar Alpha Diallo, Theresa Azonima Irinyenikan, Thae Maung Maung , Soe Soe Thwin, Adeniyi K Aderoba, Joshua P Vogel, Nwe Oo Mon, Kwame Adu-Bonsaffoh,9 Özge Tunçalp
¿Qué se sabe ya?
► Dos revisiones Cochrane han demostrado que el apoyo proporcionado por un acompañante de parto durante el trabajo de parto y el parto mejora los resultados maternos y perinatales, incluyendo la mejora del proceso fisiológico del parto y la ayuda a las mujeres a tener experiencias de parto positivas.
► Estas revisiones disponibles también han demostrado que las mujeres valoran en gran medida y se benefician de la presencia de una persona de apoyo de su elección durante el trabajo de parto y el parto, que puede proporcionar apoyo emocional, psicológico y práctico y asesoramiento a las mujeres durante el trabajo de parto y el parto. ► Existen pruebas limitadas y variadas que utilizan datos empíricos para examinar la asociación entre el acompañamiento durante el parto y el maltrato a las mujeres durante el parto.
¿Cuáles son los nuevos hallazgos?
► Aportamos pruebas de que las mujeres sin acompañantes laborales experimentaron algunas formas de maltrato, pero no todas, con mayor frecuencia que las mujeres con acompañantes laborales, y de que esta asociación varió en función del país.
► El uso de una herramienta estandarizada para examinar el maltrato de las mujeres durante el parto en cuatro países de ingresos bajos/medios facilita la comparabilidad de los resultados entre distintos entornos y contextos.
Más de la mitad de las puérperas encuestadas en Nigeria, Ghana, Guinea y Myanmar declararon tener un acompañante durante el parto. La presencia de un acompañante de parto se asoció a un menor riesgo de maltrato físico, exámenes vaginales no consentidos y mala comunicación con el personal sanitario, variando según el país. Permitir que las mujeres tengan un acompañante de su elección puede ser una intervención eficaz y de bajo coste para reducir el maltrato durante el trabajo de parto y el parto en entornos de bajos recursos. Es necesario seguir investigando para determinar las mejores formas de implantar el acompañamiento durante el parto en distintos entornos y garantizar que se respeten las elecciones y la autonomía de las mujeres.
Theresa Azonima Irinyenikan, Adeniyi Kolade Aderoba, Olufunmilayo Fawole, Olusoji Adeyanju, Hedieh Mehrtash , Kwame Adu-Bonsaffoh Thae Maung Maung, Mamadou Dioulde Balde, Joshua P Vogel, Marina Plesons, Venkatraman Chandra-Mouli, Özge Tunçalp, Meghan A Bohren
¿Qué se sabe ya?
► A pesar de los considerables progresos realizados en la prevención de los embarazos en la adolescencia en los últimos 25 años, se calcula que cada año dan a luz 12 millones de chicas de entre 15 y 19 años.
► Las adolescentes y las mujeres jóvenes tienen menos probabilidades que las mujeres adultas de recibir la atención sanitaria materna y el apoyo que necesitan en los centros de salud.
► Las mujeres adultas que experimentan malos tratos durante el parto tienen más probabilidades de manifestar una baja satisfacción con la atención, pero no se ha explorado el alcance y el tipo de experiencias de maltrato de las adolescentes.
¿Cuáles son los nuevos hallazgos?
► Este estudio exploró las experiencias de maltrato durante el parto entre adolescentes (15-19 años) y mujeres jóvenes (20-24 años), y su satisfacción con la atención, utilizando encuestas transversales basadas en la comunidad en Ghana, Guinea, Myanmar y Nigeria.
► Descubrimos que las experiencias de maltrato de los adolescentes eran comunes, en particular el abuso verbal, la mala comunicación, la falta de cuidados de apoyo y la falta de intimidad.
► Las adolescentes y mujeres jóvenes que declararon experiencias de malos tratos -especialmente las jóvenes con mayor nivel educativo- eran más propensas a declarar un menor grado de satisfacción con la atención recibida.
La morbilidad y la mortalidad de las adolescentes por complicaciones del embarazo y el parto siguen siendo importantes problemas de salud a nivel mundial. Este estudio muestra que las adolescentes y las mujeres jóvenes se enfrentan a altos niveles de maltrato y baja satisfacción con la atención al parto en los centros sanitarios en comparación con las mujeres mayores. Entre los malos tratos más comunes se incluyen el abuso verbal, la mala comunicación, la falta de cuidados de apoyo y la falta de intimidad. Se necesitan acciones críticas para que los servicios sanitarios de maternidad sean más receptivos, respetuosos con las adolescentes y sin prejuicios. Intervenciones como el acompañamiento en el parto pueden mejorar el apoyo social y emocional durante el parto. Los esfuerzos deben centrarse en abordar estas necesidades únicas y reducir el estigma social para garantizar una atención equitativa y no discriminatoria para las adolescentes y las mujeres jóvenes en todo el mundo.

KENIA
Timothy Abuya, Charlotte E. Warren, Nora Miller, Rebecca Njuki, Charity Ndwiga, Alice Maranga, Faith Mbehero, Anne Njeru, Ben Bellows
Una de cada cinco mujeres declaró sentirse humillada durante el parto. Se identificaron seis categorías de faltas de respeto y abusos durante el parto en Kenia. Las mujeres con mayor paridad tenían tres veces más probabilidades de ser detenidas por falta de pago y cinco veces más probabilidades de que se les pidiera un soborno en comparación con las madres primerizas. Comprender la prevalencia del DyA es fundamental para desarrollar intervenciones a nivel nacional, de los centros sanitarios y de la comunidad que aborden los factores que lo provocan y fomenten la futura utilización de los centros por parte de las usuarias. Es necesario seguir investigando para comprender el alcance de la D&A en otras regiones.
Patience A. Afulani, Nadia Diamond-Smith, Ginger Golub y May Sudhinaraset
Este documento presenta una herramienta para medir la atención a la maternidad centrada en la persona (CMCP) en entornos en desarrollo, adecuada para su validación o uso directo si la validación no es factible. Puede administrarse a mujeres hasta 9 semanas después del parto mediante entrevistas a la salida o en la comunidad, idealmente por personal no sanitario para reducir el sesgo. La herramienta permite la medición cuantitativa de las experiencias de parto, lo que posibilita las comparaciones, el análisis estadístico y la evaluación de las intervenciones. La administración periódica por parte de los responsables de los centros puede ayudar a identificar áreas de mejora de la calidad. El desarrollo de escalas similares para otros servicios de salud reproductiva apoyará la mejora de la atención y los resultados de la salud reproductiva centrados en la persona.
Charlotte E. Warren, Rebecca Njue, Charity Ndwiga y Timothy Abuya
Los resultados que aquí se presentan contribuyen al creciente corpus de bibliografía sobre el maltrato de las mujeres durante el parto y el alumbramiento, destacando los factores impulsores a nivel individual, familiar, comunitario, de los centros y de las políticas. Los marcos emergentes que categorizan estas manifestaciones en temas o componentes ayudan a centrarse en intervenciones específicas para promover una atención respetuosa de la maternidad. Los hallazgos de Kenia se alinean con la literatura emergente, demostrando que se trata de un problema global que requiere una solución global.
Los malos tratos, la violencia y el control durante el parto, así como la vulnerabilidad de las mujeres, siguen estando poco teorizados jurídicamente. Esta colección ofrece un comienzo prometedor pero deja muchos temas sin explorar. Los capítulos centrados en el derecho abordan la violencia visible y los abusos durante el parto, dejando de lado la violencia estructural. Esto es crucial, ya que la violencia individual se deriva de las desigualdades estructurales. El papel de los tribunales a la hora de abordar la violencia estructural no está claro. El caso keniano de Majani, fallado a su favor, lo pone de relieve, pero el tribunal no ordenó los cambios estructurales necesarios. La cuestión de si la negligencia médica constituye violencia obstétrica sigue abierta. Algunas investigaciones y leyes en estados mexicanos reconocen la negligencia médica como violencia obstétrica, pero no está claro si las teorías contemporáneas incluyen la negligencia y cómo debería responder la ley. Este libro pretende iniciar un debate sobre los límites de la violencia obstétrica. Hasta que no se comprenda su naturaleza polifacética, no podrán desarrollarse respuestas jurídicas eficaces. La esperanza es que este volumen inspire mejores respuestas jurídicas y un trato más respetuoso a las parturientas.

MALAWI
Reena Sethi, Shivam Gupta, Lolade Oseni, Angella Mtimuni, Tambudzai Rashidi y Fannie Kachale
Cada vez hay más evidencia a nivel mundial de que el trato negativo a las mujeres embarazadas durante el trabajo de parto y el parto puede ser un obstáculo para buscar atención materna calificada. Hasta el momento, se ha publicado poca evidencia cuantitativa sobre el irrespeto y el abuso (D&A) en Malawi. El objetivo de esta investigación es describir la prevalencia de irrespeto y abuso durante el trabajo de parto y el parto a través del análisis secundario de observaciones clínicas directas, y explorar la asociación entre la observación de elementos de D&A con el lugar de parto y las características de fondo de las pacientes.

NIGERIA
Foluso Ishola1,2*, Onikepe Owolabi3,4, Veronique Filippi3 | 1 Atlas Service Corps, Washington, Distrito de Columbia, Estados Unidos de América, 2 International Centre for Evaluation and Development, Nairobi, Kenia, 3 Faculty of Epidemiology and Population Health, London School of Hygiene and Tropical Medicine, Londres, Reino Unido, 4 Guttmacher Institute, Nueva York, Estados Unidos de América
Esta revisión sistemática documentó una amplia gama de comportamientos irrespetuosos y abusivos experimentados por las mujeres durante el parto en Nigeria, junto con sus factores contribuyentes y sus consecuencias. Los factores que influyen en estos comportamientos sugieren la necesidad de educar a las mujeres sobre sus derechos, reforzar los sistemas sanitarios para que atiendan las necesidades específicas durante el parto, mejorar la formación de los proveedores para que incluyan la atención interpersonal y aplicar y hacer cumplir las políticas de atención respetuosa a la maternidad. Además, esta revisión pone de relieve la necesidad de realizar investigaciones más sólidas para profundizar en la falta de respeto y el maltrato a las mujeres durante el parto en Nigeria y proponer intervenciones eficaces.
Meghan A. Bohren, Joshua P. Vogel, Bukola Fawole, Ernest T. Maya, Thae Maung Maung, Mamadou Diouldé Baldé, Agnes A. Oyeniran, Modupe Ogunlade, Kwame Adu-Bonsaffoh, Nwe Oo Mon, Boubacar Alpha Diallo, Abou Bangoura, Richard Adanu, Sihem Landoulsi, A. Metin Gülmezoglu1 y Özge Tunçalp.
La agenda transformadora de los ODS ofrece un marco global para abordar las desigualdades sanitarias y de género y mejorar las experiencias sanitarias. Eliminar todas las formas de maltrato a las mujeres durante el parto en los centros es crucial para transformar los servicios de maternidad y centrarlos en las necesidades de las mujeres y sus familias. Para lograrlo, se necesitan herramientas de medición fiables que permitan comprender el alcance y la carga de los malos tratos en diferentes contextos, medir los progresos e identificar las áreas de intervención y desarrollo de políticas. Utilizamos un enfoque sistemático de métodos mixtos para desarrollar dos herramientas -una observación del parto y una encuesta comunitaria- para medir el maltrato durante el parto en cuatro países. Estas herramientas están ahora a disposición del público y animamos a otros investigadores y ejecutores de programas a que las utilicen en sus contextos. Prevemos que estas herramientas evolucionarán con nuevos estudios. Al medir el maltrato durante el parto, podemos diseñar y aplicar programas y políticas para transformar globalmente los servicios de maternidad.
Meghan A Bohren, Hedieh Mehrtash, Bukola Fawole, Thae Maung Maung, Mamadou Dioulde Balde, Ernest Maya, Soe Soe Thwin, Adeniyi K Aderoba, Joshua P Vogel, Theresa Azonima Irinyenikan, A Olusoji Adeyanju, Nwe Oo Mon, Kwame Adu-Bonsaffoh, Sihem Landoulsi, Chris Guure, Richard Adanu, Boubacar Alpha Diallo, A Metin Gülmezoglu, Anne-Marie Soumah, Alpha Oumar Sall, Özge Tunçalp
Más del 40% de las mujeres observadas y el 35% de las encuestadas sufrieron malos tratos durante el parto. Las mujeres más jóvenes y con menor nivel educativo eran las que corrían mayor riesgo, lo que subraya la necesidad de intervenciones a varios niveles. Abordar estas desigualdades y promover una atención a la maternidad respetuosa para todos es esencial para mejorar la equidad y la calidad sanitarias. Nuestros hallazgos pueden servir de base a políticas y programas para garantizar que todas las mujeres tengan experiencias positivas durante el embarazo y el parto, con el apoyo de profesionales sanitarios capacitados dentro de sistemas sanitarios que funcionen correctamente. Es necesario tomar medidas urgentes para mejorar la prestación de una atención respetuosa a la maternidad en todo el mundo.
Mamadou Dioulde Balde, Khalidha Nasiri, Hedieh Mehrtash, Anne-Marie Soumah, Meghan A Bohren, Boubacar Alpha Diallo, Theresa Azonima Irinyenikan, Thae Maung Maung , Soe Soe Thwin, Adeniyi K Aderoba, Joshua P Vogel, Nwe Oo Mon, Kwame Adu-Bonsaffoh,9 Özge Tunçalp
Más de la mitad de las puérperas encuestadas en Nigeria, Ghana, Guinea y Myanmar declararon tener un acompañante durante el parto. La presencia de un acompañante de parto se asoció a un menor riesgo de maltrato físico, exámenes vaginales no consentidos y mala comunicación con el personal sanitario, variando según el país. Permitir que las mujeres tengan un acompañante de su elección puede ser una intervención eficaz y de bajo coste para reducir el maltrato durante el trabajo de parto y el parto en entornos de bajos recursos. Es necesario seguir investigando para determinar las mejores formas de implantar el acompañamiento durante el parto en distintos entornos y garantizar que se respeten las elecciones y la autonomía de las mujeres.
Theresa Azonima Irinyenikan, Adeniyi Kolade Aderoba, Olufunmilayo Fawole, Olusoji Adeyanju, Hedieh Mehrtash, Kwame Adu-Bonsaffoh, Thae Maung Maung ,10 Mamadou Dioulde Balde, Joshua P Vogel, Marina Plesons, Venkatraman Chandra-Mouli, Özge Tunçalp , Meghan A Bohren
La morbilidad y la mortalidad de las adolescentes por complicaciones del embarazo y el parto siguen siendo importantes problemas de salud a nivel mundial. Este estudio muestra que las adolescentes y las mujeres jóvenes se enfrentan a altos niveles de maltrato y baja satisfacción con la atención al parto en los centros sanitarios en comparación con las mujeres mayores. Entre los malos tratos más comunes se incluyen el abuso verbal, la mala comunicación, la falta de cuidados de apoyo y la falta de intimidad. Se necesitan acciones críticas para que los servicios sanitarios de maternidad sean más receptivos, respetuosos con las adolescentes y sin prejuicios. Intervenciones como el acompañamiento en el parto pueden mejorar el apoyo social y emocional durante el parto. Los esfuerzos deben centrarse en abordar estas necesidades únicas y reducir el estigma social para garantizar una atención equitativa y no discriminatoria para las adolescentes y las mujeres jóvenes en todo el mundo.

SENEGAL
Émilie Gélinas, Oumar Mallé Samb
Este estudio examina el impacto de las intervenciones de humanización de la infancia en la experiencia de la atención a las mujeres en el momento del embarazo. Les résultats montrent que l'accouchement humanisé est apprécié pour l'amélioration des attitudes et comportements des professionnels de santé. Cependant, peu de femmes ont bénéficié pleinement de l'intervention en raison de difficultés de mise en œuvre. Para mejorar la eficacia, es necesario revisar la asignación de recursos y mejorar la comunicación sobre la intervención. La preparación al embarazo, incluido el reconocimiento de los derechos y las opciones de atención, es crucial. Las mujeres señalaron la importancia del acompañamiento por parte de un progenitor, de la autorización para alimentarse y criar al bebé, y de la elección de la posición en el momento del embarazo. Les résultats suggèrent que pour améliorer la qualité des soins maternels, il faut intervenir sur ces aspects et former les professionnels de santé aux soins maternels respectueux et à la communication.

TANZANIA
Margaret E Kruk, Stephanie Kujawski, Godfrey Mbaruku, Kate Ramsey, Wema Moyo y Lynn P Freedman
MENSAJES CLAVE
- A pesar de un gran número de pruebas anecdóticas, no existen estimaciones fiables sobre la prevalencia del trato irrespetuoso y abusivo durante el trabajo de parto y el parto en los centros sanitarios.
- Medimos la frecuencia del trato abusivo e irrespetuoso durante el parto en ocho centros sanitarios del noreste de Tanzania mediante una encuesta estructurada. Entrevistamos a las mujeres al ser dadas de alta del centro y volvimos a entrevistar a un subconjunto en la comunidad entre 5 y 10 semanas después.
- La notificación de cualquier trato irrespetuoso osciló entre el 19% al alta y el 28% en el seguimiento comunitario, y entre los sucesos notificados con más frecuencia se encontraban el ignorar, gritar y hacer comentarios negativos.
- Este trabajo confirma que el trato irrespetuoso es relativamente común en este entorno de bajos ingresos y señala una crisis en un sistema sanitario que intenta animar a las mujeres a dar a luz en centros sanitarios para reducir la mortalidad materna.
Este estudio midió la frecuencia de las experiencias abusivas denunciadas durante el parto en ocho centros sanitarios del noreste rural de Tanzania y examinó los factores asociados. Mediante un cuestionario estructurado, se entrevistó a las mujeres a la salida y se volvió a entrevistar a un subconjunto entre 5 y 10 semanas después. Un total de 1779 mujeres participaron en la encuesta de salida y 593 fueron entrevistadas de nuevo. La frecuencia de cualquier trato abusivo o irrespetuoso fue del 19,48% en la muestra de salida y del 28,21% en la de seguimiento, y la diferencia se debió posiblemente al sesgo de cortesía. Entre los abusos más comunes denunciados se encontraban ser ignorada (14,24%), recibir gritos (13,18%) y recibir comentarios negativos o amenazantes (11,54%). Además, el 5,1% de las mujeres recibieron bofetadas o pellizcos, y el 5,31% parieron solas. El trato abusivo fue comunicado con mayor probabilidad por las mujeres con estudios secundarios, las mujeres pobres y aquellas con depresión autodeclarada. Entre el 19% y el 28% de las mujeres experimentaron un trato irrespetuoso o abusivo, lo que pone de manifiesto una crisis del sistema sanitario que requiere soluciones urgentes para garantizar la dignidad de las mujeres en la atención sanitaria y mejorar la utilización de los centros de parto para reducir la mortalidad materna.
Sando, David, Hannah Ratcliffe, Kathleen McDonald, Donna Spiegelman, Goodluck Lyatuu, Mary Mwanyika-Sando, Faida Emil, Mary Nell Wegner, Guerino Chalamilla y Ana Langer. 2016. "La prevalencia de la falta de respeto y los malos tratos durante el parto en centros de salud en la Tanzania urbana". BMC Pregnancy and Childbirth 16 (1): 236. doi:10.1186/s12884-016-1019-4. http:// dx.doi.org/10.1186/s12884-016-1019-4.
Este estudio es uno de los primeros en cuantificar la prevalencia de la falta de respeto y el maltrato durante el parto en un gran hospital público de un entorno urbano. La diferencia en los informes de las encuestadas entre los dos periodos de tiempo es sorprendente, y se necesita más investigación para determinar las metodologías más apropiadas para medir este fenómeno. Los niveles y tipos de falta de respeto y maltrato de los que se informa aquí representan violaciones fundamentales de los derechos humanos de las mujeres y son sintomáticos de unos sistemas sanitarios que fallan. Urge actuar para garantizar una atención aceptable, de calidad y digna para todas las mujeres.

SUDÁFRICA
RACHEL JEWKES, NAEEMAH ABRAHAMS y ZODUMO MVO CERSA, Women's Health, Medical Research Council, Private Bag X385, Pretoria 0001, Sudáfrica
Este estudio revela que las relaciones entre enfermeras y pacientes en algunas partes de los servicios de salud pública de Sudáfrica pueden estar marcadas por el conflicto, la negligencia y el maltrato, lo que contradice la imagen bondadosa de la profesión enfermera. El legado del apartheid afecta a las enfermeras negras y a la profesión, pero las malas condiciones de trabajo no explican por sí solas las actitudes del personal. Los malos tratos persisten incluso en zonas con buenos recursos, y van dirigidos a mujeres negras sin poder que buscan atención obstétrica. Las enfermeras pueden utilizar la violencia para crear distancia social y mantener el poder. Las raíces del problema son complejas y tienen que ver con las malas condiciones del lugar de trabajo y con cuestiones de identidad profesional. La violencia es habitual debido a la falta de responsabilidad y a ideologías contrapuestas sobre la atención al paciente. Estos factores son potencialmente modificables.
Camilla Pickles es doctoranda en el Centro de Derecho del Menor del Departamento de Derecho Privado de la Universidad de Pretoria.
Este artículo examina los cuidados de maternidad irrespetuosos, abusivos y violentos a los que se enfrentan muchas sudafricanas. Identifica esta conducta como una violación de los derechos humanos y defiende que los cuidados de maternidad intencionadamente abusivos deben etiquetarse como violencia obstétrica, una forma específica de violencia de género, y que deben tipificarse como delito. Este planteamiento refleja una incipiente tendencia mundial a actuar contra la violencia obstétrica y se inspira en los delitos tipificados introducidos en Venezuela y México. Basándose en la experiencia latinoamericana, el artículo propone cómo debería desarrollarse la actual concepción jurídica de la violencia obstétrica para adaptarla a la posición única de las mujeres embarazadas en Sudáfrica.
Rachelle Joy Chadwick Sección de Estudios de Género, Escuela de Estudios Africanos y de Género, Antropología y Lingüística, Facultad de Humanidades, Universidad de Ciudad del Cabo, Sudáfrica
Independientemente de las raíces del trato abusivo, es importante luchar por la rendición de cuentas a todos los niveles -respecto al Estado, las instituciones médicas, los programas de formación y los profesionales individuales. El uso de la violencia en forma de prácticas coercitivas, el maltrato físico y emocional, la falta de consentimiento, la humillación intencionada, la denegación de atención y cuidados médicos durante el parto como forma de castigo y el uso innecesario de intervenciones médicas son inaceptables y reflejan sistemas arraigados de marginación de género y de clase en Sudáfrica. El estamento médico debe reconocer que las formas de abuso durante el parto y el alumbramiento son algo más que las acciones de unos pocos individuos mal informados y abordar el sexismo y el clasismo sistémicos más amplios en la formación médica, los protocolos establecidos y las actitudes hacia las mujeres y las niñas en edad fértil.
Rachelle Chadwick Universidad de Ciudad del Cabo, Sudáfrica
La violencia obstétrica se reconoce cada vez más como un problema mundial en diversos contextos geopolíticos. A pesar de la creciente atención prestada a la salud pública, las psicólogas feministas no se han ocupado suficientemente de este fenómeno. Este artículo aborda esta laguna analizando los relatos de 35 mujeres negras con bajos ingresos de Ciudad del Cabo (Sudáfrica), centrándose en la violencia obstétrica como un proceso relacional, disciplinario y productivo que afecta a las subjetividades y la agencia de las mujeres durante el parto. Las conclusiones revelan que la violencia obstétrica debe considerarse como algo más que actos aislados, funcionando en cambio como un modo de disciplina incrustado en dinámicas de poder de clase, género, raza y medicina, enmarcado en un enfoque foucaultiano y en el concepto de ensamblaje.
Pickles C "Haciendo sonar la alarma: El Gobierno de la República de Namibia contra LM y los derechos de la mujer durante el parto en Sudáfrica" PER / PELJ 2018(21) - DOI http://dx.doi.org/10.17159/1727-3781/2018/v21i0a4303
Gobierno de la República de Namibia contra LM [2014] NASC 19 (en adelante, el caso LM) se refiere a la esterilización involuntaria de mujeres durante el parto. El Tribunal Supremo de Namibia dictaminó que obtener el consentimiento durante el momento álgido del parto es inadecuado porque las parturientas carecen de la capacidad de dar su consentimiento debido a la intensidad de sus dolores de parto. Este artículo reconoce que el caso LM puede abrirse camino en las actuales estrategias de litigio contra las esterilizaciones involuntarias en Sudáfrica y por este motivo evalúo la solidez del razonamiento del tribunal en el caso LM. Argumento que el tribunal se basó en el nocivo estereotipo de género de que las parturientas carecen de capacidad para tomar decisiones, expongo este estereotipo como infundado y demuestro las consecuencias perjudiciales de su perpetuación. Por último, demuestro por qué el razonamiento del caso LM es especialmente problemático en el contexto sudafricano, y concluyo que la adopción de este tipo de razonamiento hará que muchas mujeres se enfrenten a graves injusticias, porque ataca el núcleo de la agencia de una mujer durante el parto.
La presentación fue compilada por los investigadores Dra. Jessica Rucell, Dra. Rachelle Chadwick, Lieketseng Mohlakoana-motopi y Kerigo E. Odada.
Esta presentación ofrece una visión global de las diversas formas de violencia a las que se enfrentan las niñas y las mujeres cuando acuden a los servicios de salud reproductiva, especialmente durante la maternidad y el parto. También proporciona un análisis detallado de las causas subyacentes y los factores que impulsan esta violencia específica contra las mujeres. Además, la presentación resume y analiza los marcos jurídicos nacionales, regionales e internacionales que rigen la prestación de atención sanitaria reproductiva en Sudáfrica, con especial atención a la protección de los derechos de las mujeres, especialmente sus derechos de salud sexual y reproductiva.
Rodante van der Waal, Veronica Mitchell, Inge van Nistelrooij & Vivienne Bozalek (2021) La violencia obstétrica en el rito de paso de las estudiantes: La reproducción del sujeto obstétrico y su (m)otro racializado, Agenda, 35:3, 36-53, DOI: 10.1080/10130950.2021.1958553
Basándose en los trabajos de Mbembe y Silva, este texto teoriza que la institución obstétrica sigue siendo fundamentalmente moderna, entrelazada con el colonialismo, la esclavitud, la bio y necropolítica y el patriarcado. Sostiene que los profesionales obstétricos modernos (médicos o comadronas) alteran y racializan al (m)otro para afirmar su propia autodeterminación y su razón universal. Aunque Davis-Floyd describió la formación obstétrica como un rito de iniciación tecnocrático, el texto sostiene que esta formación implica una violencia y un racismo significativos, lo que revela una cuestión más profunda de maduración de los estudiantes a través de la apropiación violenta del (m)otro. Al examinar las experiencias de los estudiantes en Sudáfrica y los Países Bajos, el texto pone de relieve las tendencias sistémicas globales que empujan a los estudiantes a violar los límites éticos, sociales y políticos. Esta violencia incrustada en su formación perpetúa el sujeto obstétrico moderno, el (m)otro racializado y la violencia institucionalizada a escala mundial.
Camilla Pickles
Las directrices basadas en la evidencia desempeñan un papel crucial en la atención a la maternidad, con el objetivo de beneficiar a las mujeres y mitigar las faltas de respeto y los abusos durante el embarazo y el parto. Sin embargo, este capítulo destaca cómo estas directrices pueden llevar a que las mujeres sean silenciadas, excluidas de la atención y sufran violaciones psicológicas. Revela que la ley proporciona poca influencia contra las decisiones médicas que afectan negativamente a las mujeres. Se argumenta que estas experiencias negativas no son meros accidentes o resultados aceptables de una "buena práctica médica", sino que constituyen violencia obstétrica. Las directrices basadas en pruebas pueden facilitar esta violencia al permitir aplicaciones perjudiciales de los conocimientos médicos y justificar la violencia contra las mujeres. El hecho de que no se reconozcan plenamente estos defectos puede deberse a que quienes promueven las directrices entienden de forma limitada el maltrato y la violencia. Reconocer estas circunstancias como violencia contra las mujeres impone importantes obligaciones estatales para prevenir y proteger a las mujeres de dicha violencia. Esto puede lograrse apoyando directrices basadas en pruebas que promuevan la toma de decisiones informadas y desarrollando soluciones legales creativas para abordar las diversas necesidades de las mujeres, especialmente cuando los proveedores de atención sanitaria intentan anularlas y silenciarlas utilizando estas directrices como justificación.
SUDÁN DEL SUR
Sumit Kane, Matilda Rial, Maryse Kok, Anthony Matere, Marjolein Dieleman y Jacqueline E. W. Broerse
Las barreras relacionadas con la accesibilidad geográfica, la asequibilidad y la percepción de los servicios de salud materna en Sudán del Sur persisten y deben abordarse. Igualmente importante es abordar las barreras sociales de accesibilidad identificando y mitigando los temores y preocupaciones sociales sobre las violaciones de la dignidad que pueden disuadir a las mujeres de utilizar estos servicios. Los servicios sanitarios deben aspirar a transformar las instalaciones en espacios sociales donde se proteja y defienda la dignidad de todas las mujeres y ciudadanos.
